1 de marzo 2022
Por Fernanda Rivera
Aprender a leer es una ardua tarea, tanto para los niños como para los adultos encargados de acompañarlos en este viaje. Antes, durante y después de la alfabetización hay que procurar inculcar el amor por la lectura. Pueden existir varios motivos para esto, entre ellos, que tengan un mejor desempeño académico, que tengan una mejor comprensión lectora y mejores estrategias de redacción y, ¡claro! ¡También que se diviertan leyendo!
En este artículo te cuento 5 estrategias para hacer que tus niños amen leer.
1. Lectura compartida en familia
La lectura compartida consiste en dos elementos: Por un lado, la narración o lectura de parte del adulto y, por el otro , la participación del niño. La lectura compartida es vital para aprender a leer.
La idea es buscar estrategias para hacer que los niños participen activamente en la narración. No hay que pensar en el momento de la lectura como una tarea más, sino como un momento de calidad en familia. Trata de alejarte de las pantallas un rato y dedica unos minutos a esta actividad para sacar el mayor provecho posible.
2. Lectura dialógica
Otra estrategia para leer en familia es la lectura dialógica. Ésta consiste en cambiar los roles tradicionales del lector-adulto y el oyente-niño. Se trata de dar un giro a los roles tradicionales hará que la lectura sea aún más emocionante para tu niño o niña. De esta manera, tendrá una participación mucho más activa. ¿Cómo lograrlo?
Así como al aprender a leer era importante tener un modelo de lector experto, también lo es en las siguientes etapas de desarrollo. ¡Échale ganas a la narración!
3. Pon el ejemplo
Algunas técnicas para darle vida al texto son:
- Ponerse en el lugar del personaje
- Hacer gestos y mímica teatral al leer
- Hacer pausas y cambios de entonación
Después de un tiempo, ¡tu niño también querrá leer como tú! Entonces habrás marcado un punto de referencia de una buena lectura, con buena velocidad, entonación y ritmo.
4. Crea un espacio acogedor
Elige un espacio acogedor en casa y adáptalo para el tiempo de lectura. Puedes colocar cojines, una frasada, velas aromáticas, una bonita lámpara, ¡lo que se te ocurra!
5. ¡Haz que sea divertido! Crea actividades alrededor de la lectura
Procura crear actividades al rededor de la lectura, como la selección del libro, adivinar de qué tratará, predecir qué pasará más adelante, ilustrar capítulos que no incluyan dibujos, actuar el cuento entero en una presentación casera, ir a la biblioteca o la librería…
Recordemos que «la letra con sangre entra» ya NO funciona! (y dudo que lo haya hecho). Busquemos actividades divertidas llenas de amor para hacer de nuestras personitas unos seres funcionales y felices.